Desde principios de este siglo 21, en la Argentina se profundizó un fenómeno contrario a lo que el país vivió cuando comenzó a organizarse social, política e institucionalmente: el alejamiento de parte de su población en busca de una estabilidad en sus vidas que, por las sucesivas crisis, la Argentina no les garantizaba. Esa ola no paró de crecer y hubo años en los que fue más alta que otros. Jóvenes profesionales y también con oficios altamente demandados en otras latitudes dejaron atrás sus afectos para buscar nuevas oportunidades fuera de su tierra. 

En los últimos años, la movilidad internacional de los argentinos ha sido un fenómeno creciente, impulsado por múltiples factores económicos, sociales y políticos. En este contexto, el gobierno de Javier Milei, con su enfoque disruptivo y reformas estructurales, ha generado un impacto significativo en la percepción y las decisiones de quienes residen fuera del país, de acuerdo con el diagnóstico realizado por ZR/Desjardins opinión pública , de Quality group. Su informe de opinión se centra en explorar la realidad de los argentinos en el exterior un año después del inicio de la gestión del economista libertario. Busca comprender las motivaciones, expectativas y experiencias de esta comunidad frente a un panorama político y económico que redefine las bases del país, explica Andrea Desjardins que, junto con Gonzalo Zalazar Romero, dirigen la consultora.

Los resultados que arrojó el sondeo, realizado a través de las opiniones de 1.390 argentinos que residen en el exterior (en su mayoría de la franja etaria de entre 31 y 45 años), indican que el 77,4% de ellos aprueba, en general, el rumbo del gobierno de Milei, con picos de respuestas afirmativas en el caso del ajuste del gasto político (87%), pero con menos adhesión respecto del recorto de las erogaciones sociales (67,7%).

Otra de las conclusiones del informe al que accedió LA GACETA sostiene que los expatriados observan, en un 80% de los consultados, que la Argentina mejorará el rumbo económico y que ese proceso puede demandar entre dos y cinco años, según la expectativa de la mayoría (29% en un bienio y otro 25,9% consideró que esa mejora se dará en un lustro).A su vez, seis de cada 10 personas considera que las medidas son sostenibles en el tiempo. Además, el 74% de esas personas señala que el actual gobierno mejoró la imagen del país en el exterior, al menos en el país donde residen actualmente.

Un programa español busca argentinos para emigrar.

Más allá de esas expectativas satisfactorias, casi el 75% de los que emigraron responden que es poco y nada probable que regresen pronto para estar cerca de sus familiares, en la tierra donde nacieron. Y poco más del 96% de los consultados indica que está muy conforme o conforme de residir fuera de la Argentina. Asimismo, el 67% no votó la última vez en las elecciones generales de 2023. “Venimos haciendo entrevistas y focus group sobre la inmigración y Milei, los que residen afuera en mayor medida apoyan la apertura del modelo de gestión actual, como condición exclusiva para pensar en volver a la Argentina”, explica Desjardins ante la consulta de LA GACETA.  “Ellos se fueron para poder estabilizar su economía y proyectarse. Observan que no evaluarán volver hasta que en la Argentina haya una moneda fuerte o estable; eso, apuntan, es una condición para su estabilidad y, así, poder proyectar su vida”, acota la consultora.